Mamparas correderas
Las mamparas correderas son de las más conocidas y solicitadas. Se deslizan de forma horizontal para poder entrar y salir de la ducha con facilidad. Son perfectas cuando lo que se busca es que toda la bañera o toda la ducha quede completamente tapada para evitar la salida de agua. Herméticas y de lo más estéticas.
Mamparas con vértice
Se trata de una modalidad de las mamparas de baño correderas, pero, en este caso, se unen las dos puertas, que disponen de movilidad en un mismo perfil. Las mamparas con vértice cuentan con una esquina o vértice, que es la zona por la que se accede a la ducha. Prácticas, cómodas y con estilo.
Mamparas abatibles
En este caso, las partes que componen la mampara tienen la misma movilidad que la de una puerta común con unas bisagras que lo permiten. En algunos casos solamente son abatibles hacia un lado y en otros, hacia ambos; dependerá de la disposición de la ducha y de las peticiones de cada cliente.
Mamparas semicirculares
Las mamparas semicirculares tienen un funcionamiento similar al de las mamparas en vértice o correderas. Sin embargo, se diferencian de estas en que las puertas tienen una forma semicircular. Es la mejor opción para baños en los que hay poco espacio, consiguiendo ventilación sin generar obstáculos indeseados.
Mamparas fijas
La principal característica de las mamparas de ducha fijas es que están conformadas por uno o varios cristales fijos, de tal manera que el plato de ducha no se cierra por completo. Su funcionalidad, elegancia y minimalismo consiguen que este tipo de mamparas de ducha tengan cada vez más seguidores.